Y luego de unos meses alejada de los fines que me arrastran hasta este rinconcito, encuentro los ánimos para volver a dar rienda suelta a la conexión directa entre mis neuronas y mis dedos...
Debo decir que aunque las aguas siguen turbias, las corrientes bravas y el cielo nuboso, la promesa de la calma luego de la tormenta hoy me parece mas cierta, menos distante, mas real. Hoy decidí ver los obstáculos como seres inertes (aunque lleven nombre y apellido)que me ayudan a levantar un poco mas los pies del suelo, y eso amigos míos es lo mas parecido a volar que se me ocurre.
O que es volar si no desafiar la gravidez que nos ancla los pies al polvoriento terreno, que no tendrá reparos en devorarnos cuando ya el aliento deje nuestro cuerpo? Así que hoy, y tal vez solo hoy, he decidido ver aquello que se me cruce en el camino entre mi nirvana y yo, vulgares rocas de las que cuidare atentamente la punta de mis dedos, para no tropezar, para pasarlas por alto, para tomar impulso y ganar con esto agilidad en la carrera. Una carrera que es contra nosotros mismos, contra nuestra versión mediocre y conformista una sombra que nunca se aleja y nos mantiene en movimiento.
La mayoría del tiempo permanecemos con las ventanas cerradas, y el mundo de cada cual se circunscribe a la estrechez de miras, la angostura de criterios, y la condición ordinaria de sus sueños. Convendría de vez en cuando no olvidar que La Creación es vasta, convendría dejar de lado un momento el antropocentrismo renacentista y aprovechar de una buena vez toda nuestra capacidad.
Hay mas días que longaniza dicen en mi tierra... no hay situaciones sin salida, en un mundo tan lleno de opciones y rutas de escape. El Sol, ese astro maravilloso que comparte su vida conmigo, viviendo el día a día lo mas radiante que puede aun sabiendo que su brillo tiene fecha de caducidad, es mi mejor ejemplo. Mis ideales, mis anhelos, mis ideas acerca de la justicia, de la igualdad, del respeto, son orgullosamente, la fuerza que me mueve, que me impulsa....una causa imposible? ya van siendo mis favoritas.
Días como hoy me alegro infinitamente de mi exclusividad. De pertenecer a un grupo minoritario, de ser muchas veces incomprendida, de no encajar, de haber encontrado quienes me quieran así diferente, revolucionaria, inadaptada...
De retomar el evangelio según yo, de atreverme a ir contracorriente y regocijarme en ello. de aceptar la diversidad y celebrarla. De agradarme en lo simple y detestar lo rebuscado. De como volví a mis mas sinceros orígenes, del misterio de la formación de esta personita en la que me convertí y que adoro locamente.
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